Scrivener es lo mejor que he encontrado para escribir. Para escribir cosas en las que el vi no es práctico, quiero decir, porque he acabado encontrándome con tareas para las que el vi no es práctico. Pero lo dicho, Scrivener es el programa para escribir. Punto pelota. Estuve dándole vueltas a qué software usar para escritura creativa hace tiempo, estuve probando y perdí bastante tiempo leyendo lo que otra gente contaba de sus herramientas de trabajo (porque todo esto son herramientas de trabajo).
Scrivener es un software ligero, elegante, enormemente potente y que no te obliga a trabajar como un tipo al que no conoces se le ocurrió que tú debes trabajar. Solo le falta ser software libre, pero como dice uno que yo conozco a mí no me molesta el software de pago, a mí me cabrea el software malo. Scrivener tiene un precio bajísimo y te deja vivir. Es mucho más de lo que dan otros, la verdad.
Acaba de salir la versión 2.0 y he actualizado echando leches. Tiene unas cuantas cosas increíblemente prácticas, como lo que llaman collections. Copio de la página del producto:
Seguir la evolución de un personaje o idea en concreto puede complicarse bastante cuando hablamos de un texto de gran extensión. Las collections se muestran como pestañas en la parte alta del binder y permiten crear y mantener listas de documentos relacionados entre sí sin por ello modificar su posición real en la estructura del proyecto principal. Gracias a ellas es posible hacer probar secuencias alternativas de eventos, agrupar secciones que requieren atención especial o generar collections inteligentes que ejecutan búsquedas automáticas e instantáneas cada vez que se las consulta.
Hay muchas otras cosas muy interesantes en el nuevo Scrivener. Entre ellas me ha pegado al ojo la posibilidad de comparar cambios entre distintas instantáneas (snapshots). Es posible hacerle una foto a todo el proyecto desde hace tiempo, pero el hiperactivo foro de usuarios (muchísimos de ellos profesionales del cómic, la novela, o el guión para TV) va recogiendo sugerencias y el (único) desarrollador de la aplicación las va implementando. Se puede exportar el trabajo a varios formatos de libro electrónico, se puede sincronizar con servicios de almacenamiento de ficheros en nube y muchas otras cosas. Y todo lo que ya tenía, como el modo a pantalla completa totalmente configurable, sigue ahí..
Las novedades que vienen en Scrivener 2.0 están aquí: http://www.literatureandlatte.com/scrivener.php?show=new.
Solamente por permitir repartir un texto entre varios (dos o doscientos) ficheros y poderlos ver (y editar) todos a la vez o en el orden que tú elijas como si fueran un solo documento ya merece la pena, pero tiene mucho, mucho más. Por cierto, para alegría de la gente que en el foro de usuarios asegura que se pasó a Mac gracias a Scrivener (sí, tiene un impacto tan grande en algunas personas) tienen una beta para Windows. Está a medio camino entre Scrivener 1.4 y Scrivener 2.0, pero según el autor en cosa de un año ambas versiones deberían ser prácticamente iguales.
No me han pagado para que hable bien de Scrivener. De hecho pagué la actualización como casi todos los usuarios hemos hecho, pero creo que debo recomendarlo a mis lectores (amigos la mayoría) porque sean de los que escriben textos puramente creativos o les toque pegarse con textos de otra índole, sean de los que siguen creyendo que Word es la obra cumbre del software para trabajar con textos o sean de los que usan alguno de los clones de Word para no usar Word, creo que esto les va a ayudar mucho.
Entre los profesionales que usan Scrivener los hay que dan el último remate al trabajo en Word (me cuesta creerlo pero será verdad), en Final Draft (el estándar industrial del guión de cine) o en lo que sea que se use en su gremio.
Scrivener no es lo mejor para el acabado profesional de cualquier texto. Es lo mejor que hay para el arduo proceso de la escritura.
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Tengo la versión 2.5 y estoy encantado con las facilidades que tienes para organizar (o desorganizar) una novela larga.
Entiendo que algunos profesionales hagan sus últimas revisiones en word. Pienso que es porque en Word SÍ existe un diccionario de sinónimos españoles y en Scrivener ni tiene, ni se le espera.
Bueno, no hay diccionario integrado porque no hay masa crítica, pero Word es el peor invento (de lejos) para nada que no sea una cuartilla. Cuando yo empecé a usar Scrivener no había nada en castellano, ahora creo que hay traducción del software, puedes usar nombres y apellidos españoles (¡y hasta seleccionar catalanes!) en el generador de nombres de personajes y cualquier día aparecerá la documentación oficial en castellano.
Es cuestión de tiempo.
En cualquier caso puedes hablar con los desarrolladores y ver si pueden integrar alguno de los que ya hay. No se, alguno libre seguro que hay. No se siquiera si tienen eso en inglés. Con la función de “autocompletar” he tenido bastante y lo que hace es ir suponiendo que vas a usar palabras largas y enrevesadas que ya has usado, algo muy útil con nombres de sitios e instituciones alemanas, por ejemplo 🙂
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