Miro y remiro esta foto y cada vez me gusta más. Una mujer plantada delante de un mando de los antidisturbios.
Un hombretón que le saca media cabeza, que lleva la porra en la mano, que va blindado. Pero es él quien debiera tener miedo.
La mujer le mira directamente, le desafía por el solo hecho de estar donde estar y seguro que sabe el peligro que está corriendo, como lo sabe la gente que contempla la escena a sabiendas de lo que va a suceder casi con toda seguridad.
En la mirada de la mujer no veo odio. Veo dignidad en su actitud, hastío, valor y compromiso, pero en su mirada no veo odio. No veo que le desee la muerte, el dolor, la mutilación, un apaleamiento, gasolina y fuego. No es eso lo que veo.
Lo que veo es que cuando esos antidisturbios se abran la muñeca o se disloquen un codo a base de apalear obreros, cuando se les clave la uña del dedo gordo del pie por una patada muy mal dada, cuando vayan al colegio de sus hijos a quejarse porque hay algún problema y el problema es que hay pocos profesores, cuando hagan eso les van a mirar así.
Fuente: PeriodismoHumano.com
Somos el pueblo, somos del pueblo. Te enseñamos a leer a ti como enseñamos a leer y a sumar a tus hijos, te ponemos vacunas, conducimos los trenes, recogemos la basura, apagamos los incendios, madrugamos y trasnochamos por los turnos de trabajo, saltamos de precario a precario, pagamos las deudas de los ricos, cobramos una mierda por un trabajo que requiere años de estudios, nos desesperamos cuando no encontramos trabajo, sacamos el carbón, caminamos 500 Km al sol a ver si se nos pasa la mala hostia y resulta que al llegar al destino se nos pone una mala hostia todavía peor. Eso es lo que somos. Y te miramos así. ¿Y tú a quién puedes mirar así?
Gran foto. Por otra parte esta entrada me recuerda a “El Club de la Lucha”, de la que dejo un par de frases (aunque podían ser más):
“Perseguís a la gente de quien dependéis, preparamos vuestras comidas, recogemos vuestras basuras, conectamos vuestras llamadas, conducimos vuestras ambulancias, y os protegemos mientras dormís, así que no te metas con nosotros.”
“No sois vuestro trabajo, no sois vuestra cuenta corriente, no sois el coche que tenéis, no sois el contenido de vuestra cartera, no sois vuestros pantalones, sois la mierda cantante y danzante del mundo”.
Aquí va mi pojlaro.