Este año en la Feria de Frankfurt (el escaparate de las editoriales del mundo entero) la cultura catalana era la invitada y le tocó a Kim Monzó pronunciar el discurso inaugural. Había leído algún libro de este hombre y me gustó mucho, pero no conocía al personaje. Además he descubierto que entiendo el catalán muchísimo más de lo que yo pensaba, y eso que el Monzó habla a toda castaña. Por lo visto tuvo la precaución de darle el discurso por adelantado a los traductores de catalán a inglés y alemán, con lo que consiguió no solamente que se rieran con un trabalenguas de Dalí en catalán, sino que incluso se rieran todos a la vez. Kim Monzó, que además tiene un libro que se titula Guadalajara aunque no tenga que ver ni con la de México ni con la otra, es un tio grande. Molt gran, que se dice.
Puede uno suscribirse a los videos que van colgando. Muy apañaos los catalanes, vaya que sí.