Me han llegado estos últimos días enlaces con noticias sobre los Maristas marchándose de Guadalajara. En alguna ocasión hasta me felicitaban. Vamos, que en un caso lo que me ha llegado ha sido “La que has liao, pollito” y la noticia.
Según lo veo esto es nada más que los maristas asumiendo que no tienen vocaciones suficientes para cubrir los poquitos puestos que le daban a los “hermanos” en sus propios colegios (en mis tiempos no había más de cuatro) sin recurrir a lo poco que tienen ahora, vocaciones que llegan de sitios como India, el África negra y Latinoamérica. No veo yo una institución que siempre ha sido tan racista y clasista de una forma tan velada como eficaz metiendo profesores de esos sitios a dar clase a lo que consideran la crema de la sociedad local, unos cuantos que no viven mal del todo y unos cuantos becados.
Las instituciones religiosas se mueven como los petroleros: muy despacio y con el dinero en mente. Esto ha sido una decisión económica. Van asumiendo que el negocio de la educación concertada es de donde sacan el dinero y todo lo que no es imprescindible es… prescindible. Con estar ojo avizor y saber que la doctrina que se administra sigue siendo la misma ya está todo arreglado.
Ya me gustaría haberme podido apuntar ese tanto, aunque hubiera sido en parte. Pero bueno, que haya quien viera la noticia, se acordara de mi y me la mandara me hace sentir querido y eso es mucho mejor que haberle complicado la vida a unos cuantos hipócritas. Que lo hice. Lo hicimos. Y lo haremos. Pero este tanto no es mio ni nuestro.
Enlaces a las noticias:
https://www.guadalajaradiario.es/local/57664-la-comunidad-marista-deja-guadalajara-tras-62-anos-en-la-diocesis.html
Los Maristas se quedan sin hermanos maristas en su colegio de Guadalajara